La segunda parte de "G.I. Joe" (2009) que vuelve a sumergirse en la acción pura y dura. En este caso es aún más espectacular visualmente que su predecesora, pero no deja de ser una cinta palomitera. La historia cuenta con algún que otro giro de guión interesante, pero evidentemente no es lo mejor del filme. Los actores van mostrándose en pantalla de modo correcto, como Channing Tatum, Dwayne "The Rock" Johnson o incluso Bruce Willis, pero lo mejor son sin duda los efectos especiales, incluyendo un buen 3D. Es sencillamente una película para amantes de la acción sin pretensiones.
Nota: 6 (de 10)
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