El director londinense Steve McQueen, que se ganó el respeto de la crítica con su excelente película "Shame" (2011) o con "Hunger" (2008), ha entrado de lleno en el tema de la esclavitud con una película dura, descriptiva y magníficamente ambientada a mitad del siglo XIX, la cuál está basada en la historia real vivida por Solomon Northup, un hombre libre vendido como esclavo por varias personas sin escrúpulos. La cinta complementa a otras ya vistas en el cine sobre la maldad sufrida en el periodo de esclavitud norteamericana, como "El color púrpura" (1985) o la llamativa -y menos seria- "Django desencadenado" (2012) de Tarantino. En este caso hay momentos que son casi de tipo documental y muy bien retratados, y el director sabe manejar con maestría la trama alternando situaciones inquietantes, incómodas y ágiles con bastantes momentos de parsimonia que teóricamente parecen intentar transmitir la lentitud del paso del tiempo y cómo éste se escapa imparable entre los dedos de Solomon lejos de su verdadero hogar y su familia. El trabajo de los actores es excelente, especialmente el del protagonista Chiwetel Ejiofor, así como el de Michael Fassbender -actor fetiche de McQueen- o los del magnífico Benedict Cumberbatch. Además hay pequeñas apariciones de otros grandes actores que también dejan huella, como Paul Giamatti o Brad Pitt. Ésta es sin duda una gran película.
Nota: 8 (de 10)
1 comentario:
Tenía ganas de verla, y después de esta crítica todavía más :I
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